20090128

La terra e la morte 1945-1946 Cesare Pavese

Y entonces nosotros, cobardes,
que amábamos la tarde susurrante,
las casas,
los senderos sobre el rio,
las luces rojas y sucias
de aquellos parajes, el dolor
endulzado y callado-
arrancamos los manos
de la viva cadena
y callamos, pero el corazón
se nos sobresaltó sangriento,
y ya no hubo dulzura,
ya no hubo abandono
en el sendero del rio-
ya nunca más siervos, supimos
que estamos vivos y solos

3 комментария:

Gummy Bloom комментирует...

Me ha encantado tu comentario ^^

Parece que me has calado bien xD

Besos!

Анонимный комментирует...

al menos, acaba bien.

Laura Sabaté комментирует...

me encanta como escribes
al menos el gusto que tienes al hacerlo

=) ancri